Fecha de lanzamiento: 25 de noviembre de 2016
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El tercer disco de The Weeknd, Starboy, fue editado con el apoyo de varios de los nombres más importantes de la escena pop actual: Daft Punk, Lana del Rey y Kendrick Lamar. Lejos de haber grabado un álbum de hits, The Weeknd se desmarca de su producción anterior, Beauty Behind The Madness (2015). El canadiense ahondó en géneros que había vislumbrado en sus trabajos anteriores: soul, hip hop y R&B. Pero en este caso, The Weeknd no busca solamente la masividad (que consiguió con el hit Can’t Feel My Face), sino también la madurez. Tal vez, el gran inconveniente de Starboy sea que no encontró una identidad definida: se escuchan influencias de Prince, The Smiths, Talking Heads, demasiados artistas dispares en un solo disco. Por cada canción hay varios compositores y productores. De todos modos, los temas funcionan mejor por separado que en conjunto. El primer corte de difusión, homónimo al disco, es una gran colaboración con Daft Punk, buceando entre el soul más puro y coqueteos con la electrónica. La bella voz glaciar de Lana del Rey en la efímera Stargirl Interlude es otro punto fuerte. Starboy no es un traspié, sino una etapa intermedia del crecimiento de un artista que está en plena búsqueda de su forma ideal.