The Residents tienen más de 40 años de historia, pero nadie sabe con certeza el nombre ni conoce las caras de sus integrantes. Por su sonido experimental y su propuesta vanguardista, fueron una influencia inevitable para artistas como Primus, Devo y Talking Heads, entre otros.
Además de su trabajo innovador en el rock, la electrónica, el punk, la música industrial y el lounge, The Residents también ha sido considerado como uno de los creadores del arte de la performance y el video musical. Tienen más de 60 álbumes y cortometrajes editados, y hace pocos meses se estrenó en todo el mundo Theory of Obscurity, un documental proyectado con entradas agotadas en el BAFICI 2015.
Sus primeros videos están en la colección permanente del Museo de Arte Moderno (MoMA) de Nueva York junto con el Freak Show CD-Rom en la exhibición Looking at Music 3.0. Su larga carrera de cuatro décadas también los ha tenido en el mundo del cine y de la música para la televisión, después de haber anotado varios episodios de la Pee Wee Herman Show, Hunters (Discovery Channel), The Census Taker (1985), Heaven (1987), Conceiving Ada (1997), Condo Painting (1997), Thomas Pynchon – A Journey Into The Mind (2001), Investigation Into The Invisible World (2002) y Strange Culture (2007), así como también varios proyectos para MTV.
Además, el grupo lanzó diez DVDs, y dos series por internet a través de You Tube. Recientemente, Randy, Chuck y Bob -la actual formación del grupo- se presentaron como World’s Greatest Residents’ Cover Band, celebrando sus primeros 40 años de trayectoria con una trilogía: The Talking Light, Wonder of Weird y Shadowland.
Shadowland, que incluye vídeos cortos sobre el nacimiento, renacimiento, la reencarnación y las NDE (Near Death Experience), es el epílogo de la Randy, Chuck & Bob Trilogy que presentarán en su primera gira sudamericana, que los llevará al escenario de Niceto Club el 15 de septiembre.
Antes de tocar en nuestro país, Billboard Argentina dialogó con Homer Flynn, manager, vocero, miembro de la banda o simplemente una voz con acento norteamericano que gustosamente habló sobre The Residents. “El grupo no sabe exactamente con qué se van a encontrar en Sudamérica, pero ellos están enterados que hay una gran expectativa por los shows que van a brindar allí, en especial en Argentina, y están muy emocionados. Ellos han estado en México y Centroamérica. Algo de la cultura latina conocen”, explica.
¿Qué tipo de show van a presentar?
– The Residents [remarca la tercera persona, como dejar en claro que él no es parte del proyecto] tienen un componente visual muy importante en sus shows. De su amplio catálogo siempre eligen los temas que reflejen el sentimiento de la propuesta que ellos quieren representar arriba del escenario. Desde hace cuatro años, aproximadamente, que el grupo es un trío. Bajo este formato hicieron los shows de la gira Talking Light, que hablaba de fantasmas y de la muerte. El siguiente tour, Wonder of Weird, tenía como idea conceptual el sexo, así que escogieron del catálogo temas vinculados a esa temática. Y ahora llegan con la gira Shadowland, que habla de nacimiento, renacimiento, experiencias cercanas a la muerte y la reencarnación. Lo que han hecho con esta trilogía es hablar de muerte, sexo y nacimiento.
¿Qué opinión tiene la banda sobre el documental Theory of Obscurity?
– Honestamente, The Residents tiene sentimientos encontrados al respecto de ese proyecto. Algunos lo aman, y tienen la mejor onda con Don Hardy Jr., el director de la película. Otros miembros de la banda han abrazado su propia oscuridad con tanta fuerza que rechazan la atención que el film ocasionó sobre ellos y desean que nunca se hubiera realizado. Hay integrantes de The Residents que desearían morir y que sus cuerpos sean descubiertos en cien años.
Vivimos una época en donde nadie quiere pasar desapercibido. Todos sacan selfies y desean compartir con el mundo lo genial que es su perro cuando duerme. ¿Cómo es entonces, que The Residents permanece en el anonimato?
– Una de las razones por las que The Residents tomaron esa decisión y aun se sienten a gusto con eso, es que son muy reservados, y si mostraran sus nombres y caras, van a ser conocidos, y no quieren ni ser celebridades ni la atención de los paparazzis. Al no mostrar la cara, no publicitar sus nombres, pueden tomar distancia de su arte y permanecer como personas desconocidas. Pero también saben que el anonimato les da mucha libertar para crear música.
¿Cuáles son los planes para el futuro?
– Están trabajando en nuevo álbum, pero lentamente, ya que el tour que los lleva a la Argentina todavía tiene que pasar por Estados Unidos, Europa, Japón, Australia. The Residents también están trabajando en teatro: un productor y director de Nueva York quiere montar un espectáculo sobre God in Three Persons, álbum lanzado en 1988. La banda siempre pensó ese disco es una pieza de teatro que merecía ser representada, pero hasta el día de hoy no supieron resolver de qué manera podrían concretar ese proyecto. Están muy entusiasmados. Seguramente la obra se estrenará dentro de dos años.