Esta mañana, Taylor Swift declaró ante una Corte de los Estados Unidos por la causa en la que acusa al conductor radial David Mueller de tocarla de manera inapropiada por debajo del vestido. El episodio ocurrió en un encuentro con fanáticos tras un concierto en Denver, Estados Unidos, en junio de 2013.
«Se ha hablado mucho de empujones y roces», dijo la estrella pop, refiriéndose al testimonio de Mueller el lunes pasado. «No me empujó… No rozó el brazo, no rozó mis costillas, no rozó mi mano… me agarró mi cola desnuda». En su declaración, Swift usó 13 variaciones diferentes de la frase: “Agarró mi culo por debajo de mi falda”.
En contraparte, Mueller demandó a la cantante y a su equipo, y en su defensa alegó que le costaron su trabajo. Pide por un resarcimiento de hasta $ 3 millones de dólares en daños y perjuicios. El lunes declaró: «Quiero limpiar mi nombre». Según el presentador radial, Swift contorsionó los hechos. Los abogados de Swift han dicho que ella no conoce a Mueller.