“Rock and roll cósmico” es la forma en que Támesis define a su sonido. El grupo, de hoy diez integrantes entre instrumentistas y coristas, arrancó en 2010 con la idea de fusionar el blues, el soul y un poco del rock sureño de los Estados Unidos. Por eso, al escucharlo, no habría que extrañarse de encontrar un poco de Rod Stewart con los Faces, otro poco de James Brown y otro tantito de Lynyrd Skynyrd y los Allman Brothers.
Contra la corriente es su tercer trabajo de estudio, que continúa un poco la fórmula sonora que había sido tan exitosa en las dos primeras placas: Aprendiendo a volar (2011) y Mensaje para vos (2013).
En ese sentido, buscando replicar una vez más ese sonido característico suyo, grabaron el LP en un formato en vivo en el estudio Romaphonic. Las sesiones fueron dirigidas por Germán Wiedemer, quien fue productor de, entre otras cosas, Pura sangre, de Andrés Calamaro, ganador de Mejor Álbum en los premios Gardel 2015.
El disco fue financiado por el método de crowdfunding, según el cual los fans podían donar fondos de forma directa para que, sin intermediarios de la industria, la banda pudiera realizar el proyecto. Támesis llegó a su meta de 39.000 pesos en 24 días, recaudando incluso por encima de lo previsto.
Con fecha de presentación puesta para el 28 de agosto en el Teatro Vorterix, el grupo se dispone a ajustar los detalles finales de su show listo para ofrecer, como promete, la capacidad de “sentir y vivir lo que significa el rock and roll cósmico”.