Sebastián Javier Olzanski, más conocido como Sebastián Javier, regresó a su país natal desde Canadá, donde está radicado, con nuevo material entre manos. Si bien su arte lo posicionó entre los diez adolescentes más influyentes de Canadá, hay un amor por su país de origen que se materializó en una canción que encarna aquel sentimiento que le transmite volver a casa. “Viajé por muchos lugares, pero cada vez que vuelvo a la Argentina, es mi lugar, es donde me siento en casa”, admite.
Uno de sus singles más recientes, “Manicomio” alude a la pasión que le tiene el joven artista a la música, que lo llevó a superar obstáculos sociales y a seguir luchando por su vocación, a pesar de los prejuicios. “A veces me volvía loco porque pasé por mucho bullying cuando era chiquito y seguí para adelante ya que mi sueño era ser cantante. Me gustaba mucho Justin Bieber, me inspiré muchísimo en su historia y en cómo creó las cosas. Y en su momento, todos odiaban a Justin Bieber, entonces yo cantaba sus canciones y todos me llamaban por otros nombres. Fue un poco duro pero seguí para adelante”.
Su punto de quiebre fue allá por 2016, cuando recibió una invitación para participar en el Coca Cola Music Experience en Madrid junto a Meghan Trainor. Era la primera vez que se enfrentaba a un público de unas 20.000 personas. “Estaba tan nervioso que fue una experiencia personal que me hizo crecer mucho como artista y como persona y me dio una idea de las posibilidades que puede dar la música y la potencia que hay ahí. Ese fue el momento en el que dije que quería hacer esto por el resto de mi vida”.