
El streaming se puede comparar publicitariamente a un espejo, porque refleja los estados de ánimo, modos, actividades y gustos específicos de los usuarios. Es por eso, que Spotify ha puesto especial dedicación a la creación de hubs y playlists que agrupen estos Estados, Momentos y Actitudes, los que, junto con atraer audiencias segmentadas, ayuda a las marcas a poder enfocar sus estrategias a targets específicos.
La compra programática de publicidad da acceso a esos momentos, pero con la flexibilidad de hacer cambios en tiempo real de acuerdo con la preferencia del mensaje y con alta posibilidad de segmentar la audiencia gracias al uso de la tecnología. Es toda la fuerza de Spotify potencializada, brindando agilidad y foco a las campañas permitiendo así que los anuncios sean vistos y escuchados en el momento y lugar adecuados por la audiencia más relevante según la necesidad de cada anunciante.
Según un estudio de Spotify y Quatrics Group, el 45% de los usuarios desean que las marcas entiendan lo que hacen cuando muestran sus anuncios. Esta encuesta también reveló que las empresas deben conocer más cómo se están sintiendo de sus audiencias. El 41% de los usuarios dice que para que los anuncios tengan sentido, deben ajustarse a su estado de ánimo. De eso se desprende la importancia de alcanzar al consumidor en el momento correcto y esa inteligencia la está entregando precisamente los algoritmos de Spotify.