Adele acaba de barrer del piso un récord de Oasis, aunque seguramente no vaya a recibir un mensaje de felicitaciones de parte de los ídolos del britpop.
Noel Gallagher ofreció una entrevista al medio australiano Music Feed, donde habló del pasado, del futuro y de la actualidad de la música. Respecto de la escena actual, no es novedad que no le impresiona demasiado. “La música se volvió una mierda insípida, un mar de queso”, dijo. Comentarios como estos le dieron a Gallagher la reputación de ser una máquina de tirar frases, un regalo para los periodistas. Cuando fue consultado para discutir sobre su innegable talento para hacerse notar, no defraudó al entrevistador.
“No pienso demasiado en lo que hago”, explicó. “Si me preguntan cualquier cosa, doy una simple respuesta. Es interesante que nadie hable nunca sobre mi amor por U2 o Coldplay, pero ahí tenés. Últimamente, sólo me preguntan por Adele. Si alguien quiere saber lo que opino sobre Adele, se los voy a decir y ya. No porque tenga algún tipo de agenda o porque esté tratando de azotar cualquier tipo de histeria. No veo por qué tanto escándalo. No me gusta su música. Pienso que es para fuckin’ abuelitas.”
El nuevo álbum de Adele terminó su primera semana con ventas de 800.307 copias, quebrando el récord de 696.000 alcanzado por Oasis en 1997, con Be Here Now. Aunque debe aclararse que el disco de Oasis fue lanzado un jueves, cuando las ventas de la semana en el chart se toman hasta el domingo a la noche, así que abarcó solamente tres días.
No es la primera vez que Gallagher –que vendrá al próximo Lollapalooza Argentina– acusa a una artista británica pop por hacer “música de abuelitas”. Lo mismo dijo en 2013 sobre Emeli Sande, quien tuiteó como respuesta una foto de una abuela haciendo fuck you, con el mensaje “gracias Noel”. Por el momento, Adele no dijo nada al respecto.