A primera impresión y con algo de prejuicio, uno podría pensar que a Nicky Romero le había tocado bailar con la más fea; su presentación se realizó en el mismo horario que Jack White, uno de los headliners del festival. Pero los prejuicios están para ser derrumbados, y el Perry Stage se colmó de gente a las 22:15.

Mascaras de V de vendetta, lentes de sol, celulares de pantallas amplias y muchos colores fueron la escenografía de un público que disfrutó bailando con la presentación del holandés. No faltó su hit Tolouse, ni tampoco la canción que compuso con las ascendentes Krewella:  Legacy (Save my life), además de aprovechar la noche del Lolla para presentar un adelanto de su próximo trabajo. Con un estilo predominantemente House, Nicky comenzó pidiendo tímidamente al público que levantara las manos, pero cuando el show promediaba, ya tenía la audiencia a sus pies, y la condujo a su antojo.

La sensación que causó Romero fue tal que en las redes sociales muchos protestaron porque se transmitió por streaming el show de White y no el del DJ. Gran animador del Tomorroland y de la Ultra, el holandés encontró un nuevo festival para lucirse. Porque el dueño de Protocol Records no es ningún improvisado. Está considerado como uno de los DJs más influyentes de música electrónica en Europa por sus trabajos discográficos con artistas como Calvin Harris, Krewella, Fedde Le Grand, Nervo, Avicii y Moguai, y produjo éxitos para reconocidos intérpretes pop, por ejemplo, Rihanna.