Hace seis meses, Mati Fernández publicó su single debut «¿Quién Es Ese Niño?», donde cuenta la experiencia de su vida, qué piensa la gente de él y que es lo primero que se les pasa por la cabeza cuando lo miran. En esta ocasión, el periodista de 22 años quiso ampliar la historia y presentar su primer libro: Formas Propias, Diario de un cuerpo en guerra.
En Formas Propias, editado por Grupo Planeta con una mirada repleta de sarcasmo y humor, describe esa existencia que transcurre entre la cama y la silla de ruedas pero que está lejos de ser estática. Por ella desfilan amigos entrañables, paseos hasta la plaza del barrio, enfermeros y cuidadores de toda calaña e incluso la búsqueda temerosa de la primera experiencia sexual. Mati padece una enfermedad rara que genera piel en exceso, llamada fibromatosis hialina juvenil. Hay sólo sesenta y cinco casos en el mundo, y dos de ellos están en la Argentina: uno es el suyo.
«Tuve un kinesiólogo que, en vez de llevarme a comprar galletitas al
kiosco, frenaba en la esquina y me hacía hablar con las putas. Un enfermero que me agarraba de los testículos y me preguntaba cada media hora si quería hacer pis. Otro que me quiso masturbar con guantes […]. No lloro nunca, pero se me caen lágrimas sin que me dé cuenta y hay que secarlas con un papel. […]. En el pecho tengo un nódulo que parece una teta. Soy raro, soy deforme, y voy a contar todo», se lo puede leer en alguno de sus párrafos.