Cuando el próximo 31 de julio se publiquen las reediciones de Presence (1976), In Through The Out Door (1979) y Coda (1982), Jimmy Page habrá concluido con la ardua tarea que le llevó revolver todo el material de archivo de Led Zeppelin. El trabajo más pesado ya terminó para el guitarrista, que ahora solo tiene que esperar sentado el lanzamiento. Mientras tanto, dio una entrevista para el diario inglés The Guardian, en la que recordó momentos de la carrera de la banda precursora del heavy metal.
Una de las frases que llamaron la atención está vinculada a la relación entre Page y Robert Plant con el punk, género que irrumpió en Inglaterra en 1976 para pararse en la vereda de enfrente de bandas como Pink Floyd y la propia Led Zeppelin. Si bien los referentes del punk apuntaban sus cañones contra estas bandas por ser, según su doctrina, innecesariamente complejas, Jimmy Page confesó que veía con buenos ojos el nacimiento de una corriente nueva para el rock: “Disfrutaba realmente del punk: fui a ver a The Damned con Robert Plant. Él seguramente saldría corriendo hoy de algo así, pero yo lo seguiría abrazando” dijo el guitarrista. “Me gustaba la música de Sex Pistols. Pienso que era magnífica. Eso no significa que yo iba a dejar de hacer la música que hacía.”
Page también se animó a responder qué tipo de banda hubiera sido Led Zeppelin de haber continuado durante toda la década del 80: “Si escuchás todo lo que hicimos a lo largo de los años, podés notar todas las cosas que me gustan: riff que tuvieran trucos, que fueran interesantes y provocativos. Definitivamente hubiéramos hecho algo en base a esos riffs.”
Antes de terminar, le preguntaron si lloró el final de Led Zeppelin: “Por supuesto. Naturalmente. Bajé la guitarra durante un tiempo y no quise tocar. Pero después lo hice, y fue algo terapéutico».