Ya desde el juego de palabras elegido para su promoción, @Dub (arroba dub, que remite al ‘rub a dub style’ que se desprende del reggae), podía entreverse algo del espíritu lúdico que tendría el show. Un espíritu que, por otro lado, forma parte de la esencia del género, si alcanzamos a ver la consola como un tablero, a partir del cual un artista se permite jugar con los efectos sonoros y, así, intervenir a su gusto la interpretación de un tema.
Lo cierto es que, más allá de toda expectativa generada por la invitación, la gente fue llegando de a poco, sin agolparse en la entrada, acaso respetando el ritmo pausado que propone el reggae. Los primeros aplausos fueron para Humanidub, banda local formada hace más de una década, que alternó climas e intensidades, y una melódica cercana a Augustus Pablo y la psicodelia. Después llegó el turno de los maestros venezolanos Dub Natty Sessions. Cada instrumento sonó y dejó de sonar cuando tenía que hacerlo, como lo pide en especial el reggae dub.
Con la aparición de Mad Professor, se ampliaron los alcances musicales del conjunto. Lo dejó en claro en su primera intervención, cuando ensayó combinaciones bien crudas junto al bajo y la batería. Reggae roots, en clave dub, de quien es considerado una eminencia y, como tal, dio cátedra sin opacar la prestancia musical del resto. De hecho, Henry “Matic Horns” Tenyue, extrombonista de UB40, lo aplaudía cada vez que terminaba alguno de sus solos.
Párrafo aparte para Dennis Bovell, músico y cantante de Barbados que hizo con Matumbi su carrera en Inglaterra. Un showman con voz potente y alaridos selváticos, capaz de versionar clásicos como Why am I a Rastaman de manera desafiante, y a su vez, de sumergirse en un canto relajado y melodioso. Fue el pico alto del recital, sobre todo en los pasajes de ragga muffin.
Por último, Brinsley Forde, miembro fundador de la banda inglesa Aswad, apareció en escena con su guitarra (y una actitud de frontman versátil, a veces agresivo y otras intimista) para interpretar clásicos como Don‘t Turn Around y una mezcla de Soul Rebel con I’m Still in Love With You, uno de los momentos más festejados de la noche.
El cierre fue bien arriba, con Mad Professor, Dennis Bovell y Brinsley Forde al micrófono. Entre los tres cantaron y bailaron al ritmo de un dancehall explosivo, encendieron al público y hasta se dieron el gusto de sacarse una selfie.