
¿Qué podés decirnos sobre el festival?
– Es la primera edición en la Argentina. Cuenta con dos sectores: uno indoor, donde se desarrollan los shows de las distintas bandas, y otro outdoor, donde se va a poder disfrutar de exposiciones de artes plásticas, fotografía, tattoo, skate, low riders, bicis custom y, además, una zona gastronómica.
¿Cómo se arma el line-up?
– La meta es ser distintivo. Por un lado, ante una cantidad importante de buenos festivales musicales, hay que diferenciarse del resto. Por el otro, tratamos de que haya un hilo conductor entre todos los grupos. En esta edición, lo que buscamos es unir todas las generaciones del punk rock californiano: que los fans de Dead Kennedys de más de 40 años vayan con sus hijos fans de The Offspring, que descubran una banda más joven como Anti-Flag y, a su vez, que disfruten de Cadena Perpetua y Lash Out, bandas míticas de la escena local.
Cuenta con dos sectores: uno indoor, donde se desarrollan los shows de las distintas bandas, y otro outdoor, donde se va a poder disfrutar de exposiciones de artes plásticas, fotografía, tattoo, skate, low riders, bicis custom y, además, una zona gastronómica.
¿Cómo manejan la seguridad de un show?
– La seguridad de un show es tan importante como la producción artística; es un punto clave donde la prevención y el criterio son fundamentales. La falta de criterio es lo que hizo que un evento como Time Warp se transformara en una tragedia. Cada evento tiene distintas características, por lo tanto, el venue donde se realiza, la cantidad de personal de seguridad, de médicos y ambulancias tiene que configurarse específicamente. Por ejemplo, para un festival de música electrónica no se puede contar con el mismo personal médico que para una convención de música folk.
En esta edición, lo que buscamos es unir todas las generaciones del punk rock californiano.
¿Cómo ven a la industria de producción de espectáculos?
– A nivel local, hay más jugadores que años atrás. Hoy en día conviven los gigantes de la industria, que cuentan con muchos años de trayectoria y se focalizan en eventos de más de 10.000 espectadores, y productoras nuevas, que tratan de hacerse un espacio en las plazas entre 1000 y 10.000 espectadores a fuerza de dar una experiencia distinta y vanguardista, sin perder la sensibilidad artística, que es algo que a veces se pierde cuando se crece y el único objetivo es comercial.
quiero ir al Rockout sólo para ver a the offspring
— Flør (@Flor_Martinez96) 14 de agosto de 2016
¿Cómo ven el recambio generacional de la música? ¿Cómo conviven los íconos y artistas clásicos con los nuevos exponentes?
-Lamentablemente, los años pasan y cada vez hay menos artistas clásicos. Solo en el último año, el mundo perdió a David Bowie, Prince, Lemmy Kilmister y Chris Squire de Yes, por nombrar algunos. Los nuevos artistas difícilmente lleguen al nivel de leyenda como los anteriormente nombrados, principalmente por dos razones. La primera es que los clásicos, por lo general, fueron grandes innovadores a nivel artístico, y hoy en día, los nuevos exponentes más exitosos suelen reciclar lo que los grandes artistas hicieron hace décadas, a excepciones de algunas vertientes en la música electrónica. La segunda razón es Internet, que es una herramienta tan democratizadora que hace que el público constantemente pueda conocer nuevos artistas de todo el mundo y, por lo tanto, ir diversificando sus preferencias. Hace treinta años, el público solo podía conocer nuevas bandas porque se las ponían en la radio. Hoy en día, un adolescente que vive en Quilmes puede descubrir un artista que acaba de editar su primer single en Estocolmo, minutos después de que lo sube a Internet. Eso hace que los gustos musicales sean mucho más volátiles y los nuevos artistas potencialmente más efímeros.
La falta de criterio es lo que hizo que un evento como Time Warp se transformara en una tragedia.
¿Por qué haces esto?
-Vivir de lo que más disfruto, y al mismo tiempo, que esa actividad genere un espacio para la cultura. La alegría de poder entrar a un mundo que desde chico participaba como espectador, pero desde el otro lado del vallado es un logro.
Entradas: http://www.ticketek.com.ar/rockout-2016-offspring/estadio-cubierto-malvinas-argentinas