El exitoso cantante de The Killers tocó por primera vez como solista en la Argentina y presentó su flamante segundo álbum, The Desired Effect, inspirado en el sonido británico de los ochenta.

Todo comenzó con Human. Al terminar el tema, no tardó en aparecer la ovación y la respuesta automática de Flowers, mostrando reverencia hacia sus fans como durante todo el show.  Su repertorio incluyó hits tanto de The Killers –Mr. Brightside, Read my Mind– como de su carrera en solitario –Can’t Deny My Love, Crossfire, I Can Change (con el sampleado del hit de Bronski Beat, Smalltown Boy), Lonely Town, Digging Up The Heart, Only the Young. 

En varias entrevistas, Flowers contó que estudió español, lo que le permitió cantar en nuestro idioma el estribillo de Still Want You, de The Desired Effect. “¿Qué onda, argentinos?”, gritó desde el escenario, aunque no hubo mucho diálogo, consiguió que cada persona en el Main Stage 2 bailara en cada segundo del concierto.

El cantante de Las Vegas demostró que su capacidad artística lo consolidó como una de las figuras más importante de la escena pop internacional, dándole la oportunidad de recorrer el mundo tanto acompañado por la banda que le dio la fama, como en su formato solista. En el Hipódromo, como prueba, fue ovacionado en uno de los festivales más importantes y concurridos de Argentina.