Billboard la distinguó el año pasado entre las mujeres más influyentes de la música. Rolling Stone juzgó a uno de sus temas -Hold On- como el mejor del año 2012. Paul McCartney la subió al escenario en el último Lollapalooza Chicago para hacer Get Back. Con este currículum en mano, anoche tocó Brittany Howard en Niceto Club como antesala de su presentación en el Lolla argentino.
Brittany Howard es como si Aretha Franklin tuviera menos de 30 y una Gibson SG calzada; y su banda, una licuadora rellena de Led Zeppelin, algun grupo producido por Phil Spector en los sesenta y esencias del más embrionario blues de Chicago. En la era del revival en el rock, las bandas que más se destacan son las que mejor logran interpretar viejos estilos. Pero siempre es necesaria una cuota de frescura que sirva de complemento a la reivindicación del pasado, lo mismo que propuso Alabama Shakes con su combo de soul, rock sureño y blues.
La banda del pequeño pueblo de Athens, en el estado que le da nombre, repasó todos los temas que su alma creativa compuso en apenas dos álbumes: Boys & Girls (2012) y Sound & Color (2015). Los momentos más rockeros del show fueron casi todos tracks de su último disco, que debutó en el N° 1 del Billboard 200: Gimme All Your Love, Future People, Dunes, Don’t Wanna Fight y The Greatest, una selección premium de Alabama Shakes. En cambio, de su primera publicación salieron los momentos más cadenciosos -Be Mine, Heartbreaker,On Your Way- en los que Brittany Howard lució su mejor carisma soulero. Aunque si hay que destacar uno por sobre el resto, es You Ain’t Alone, el segundo de los tres bises, un guiño ineludible al (You Make Me Feel) Like a Natural Woman de Aretha.
La frontwoman casi ni dialogó con el público, y ni siquiera presentó a sus compañeros de banda. Pero devolvió gestos tímidamente, con su sonrisa de comisuras, y se ganó constantes ovaciones a fuerza de una energía blusera, personal y despojada.
¿Es Alabama Shakes una banda revelación? Al menos en Argentina no parece tener el nivel de alcance que sí logró en Estados Unidos. Pero en un país de larga tradición blusera como el nuestro, Brittany Howard y compañía tienen reservado su lugar entre la elite. Cuando mañana entren en contacto con miles de personas que los van a conocer, será su consagración local, y entonces sí, la intimidad de anoche va a alcanzar su valor verdadero.